Aunque en la entrada sobre percepción visual voy a hablaros de leyes, quiero resaltar que hay que olvidarse por completo del concepto “reglas de composición”, voy a sumarme yo también a la opinión de José Benito y otros maestros con estas reflexiones. Voy a ir reforzando las opiniones que voy a exponeros con citas de diversos expertos, ya sean pintores, fotógrafos o lo que sean.
Esto es lo primero que contesta José Benito a una pregunta del chat de las sesiones de Un año de fotografía en la que nombran las reglas.
“Lo de las reglas me ha hecho daño. No hay reglas, no tenemos reglas, que reglas, que alguien me diga una regla que se la desmonto en segundos. No existen las reglas.”
Hay ciertos conceptos que cuando una persona se acerca por primera vez a la fotografía, y busca información en Internet, puede encontrárselos fácilmente de forma demasiado resumida y con conceptos estereotipados, yo mismo hasta que no he profundizado en el tema de la composición intenté aplicar estas “reglas”, y en cierta manera si que me ayudaron un poco al principio, después fue cuando me dí cuenta de la complejidad del tema de la composición y vi que estas reglas aparte de no ser muy efectivas, te dejan encorsetado con respecto a la creatividad en la composición, siempre igual, el horizonte en el tercio superior o inferior, por ejemplo. Pues habrá que explorar muchas más posibilidades, claro que si, hasta donde llegue nuestra imaginación, y hasta el límite de nuestros conocimientos, por lo que cuanta más formación tengamos, más podremos potenciar la creatividad.
“Enseño a mis estudiantes a no aplicar normas o formas mecánicamente.”
Josef Albers
Por eso pienso que uno de los estereotipos sobre fotografía que me he encontrado con más frecuencia en Internet es el de las “reglas de composición”, en composición no hay reglas, si no un conjunto de conocimientos adquiridos y recopilados a lo largo de la historia. Cuantos más de estos conocimientos conozcamos y más profundicemos en ellos, más variables tendremos en nuestra mente a la hora de resolver la composición de una escena de forma estética y consiguiendo el mensaje buscado de la forma más rápida, y así conseguiremos un porcentaje más alto de fotografías que nos gusten en nuestras salidas, aunque con el tema de las prisas también quiero decir que yo pienso que la mayoría de las veces es mejor pensar un poco antes de sacar la cámara, y reflexionar sobre las formas en que podrías enfrentarte a ese sujeto, y ya una vez que hayas pensado las formas de cómo lo fotografiarías, y también las formas de cómo no lo fotografiarías, por si acaso, a lo mejor con alguna de las formas que no sueles usar se podría conseguir un punto de vista distinto, y ya elegir la forma que te parezca más apropiada para lo que buscas, o para algo nuevo que no buscas, fruto del azar, pero que al final a terminado formando parte de las variables archivadas en tu cerebro como un nuevo recurso a utilizar en alguna otra ocasión.
“El concepto de “reglas de composición” es absolutamente erróneo, debería ser impronunciable. La composición proviene de conocimientos acumulados en el devenir de la Humanidad, desde la cultura Sumeria hasta nuestros días.”José B. Ruiz
Al principio de acercarme a la fotografía y empezar a buscar información, yo estudié las llamadas “reglas de composición” por que es lo primero que me encontraba en Internet cuando buscaba información sobre fotografía, pero no terminaban de convencerme del todo, eran demasiado simples, así que seguí buscando más información, y ya leyendo algunos textos me empecé a dar cuenta de donde me estaba metiendo, entonces me dí cuenta de que para aprender sobre composición era mejor buscar en webs y libros sobre arte y pintura, que en la mayoría de publicaciones sobre fotografía, que aunque también hay bibliografía variada sobre el tema de la composición en fotografía y el análisis de la imagen, cada vez que intentaba buscar en Internet información sobre composición en fotografía me encontraba con las dichosas reglas o leyes, la regla o ley de los tercios, del horizonte, etc. por eso me dio la impresión de que era mejor buscar información en textos de arte, y más concretamente de pintura, porque la pintura es mucho más antigua que la fotografía (hay tenemos las pinturas rupestres de las cuevas de Altamira) y la pintura tiene formulaciones y formas de aprenderla mucho más complejas y trabajadas que la fotografía (que no tiene ni 200 años). También hay que tener en cuenta que la fotografía y la pintura son dos medios visuales distintos y por lo tanto hace falta un adiestramiento especial para cada uno de ellos, D. A. Dondis nos dice esto en su libro “La sintaxis de la imagen”,“El gesto, la expresión, el lenguaje escrito y la simbolización están todas al alcance del lego. Pero las artes visuales, los oficios, el diseño industrial, la fotografía, la pintura, la escultura y la arquitectura requieren practicantes con adiestramiento especial y un talento adecuado. Cada medio visual no sólo tiene unos elementos estructurales propios sino también una metodología única para la aplicación de decisiones compositivas y la utilización de técnicas en su conceptualización y formalización. La comprensión de estas fuerzas ensancha el campo de la experimentación y la interpretación tanto en lo que se refiere al autor como al espectador llevándolos a un conjunto visualmente más alfabetizado de criterios que pueden unir más estrechamente realización y significado.”
El concepto de “reglas de composición” lo encontramos por Internet muy a menudo, y llevamos ya muchos años lastrados con el, Ansel Adams tiene ya una cita al respecto, “Las llamadas reglas sobre composición son, en mi opinión, inválidas, irrelevantes e inmateriales. No existen reglas para las buenas fotografías, solo buenas y malas fotografías”, por lo que en mucha gente puede actuar como la publicidad, por efecto de saturación o reiterada exposición, por eso con estas reflexiones quiero contribuir a intentar que la gente se vaya olvidando de estas reglas y se forme de manera más profunda y que investigue nuevas posibilidades y no intente hacer buenas fotografías con cuatro conceptos que te digan en una revista u otro sitio, se aprende mucho más de composición estudiando a Leonardo Da Vinci y otros maestros de la pintura, o el número Phi y la sección áurea o la percepción visual por ejemplo, que en el mayor número de publicaciones y artículos actuales sobre composición en fotografía, que pretenden resumirte unos amplios y vastos conocimientos en cuatro reglas simplonas y encima te dicen “Todo lo que hay que saber sobre la composición en fotografía” o “Aprende composición en una semana”, y ya está, pero muy al contrario de lo que nos quieren vender en muchos sitios, aprender sobre composición requiere de muchos años de estudio y de práctica, ya que no es fácil educar nuestra mirada y nuestra sensibilidad para aprender a ver de verdad.
“Visión es el arte de ver lo que es invisible para otros”
Jonathan Swift
Esto es lo primero que contesta José Benito a una pregunta del chat de las sesiones de Un año de fotografía en la que nombran las reglas.
“Lo de las reglas me ha hecho daño. No hay reglas, no tenemos reglas, que reglas, que alguien me diga una regla que se la desmonto en segundos. No existen las reglas.”
Hay ciertos conceptos que cuando una persona se acerca por primera vez a la fotografía, y busca información en Internet, puede encontrárselos fácilmente de forma demasiado resumida y con conceptos estereotipados, yo mismo hasta que no he profundizado en el tema de la composición intenté aplicar estas “reglas”, y en cierta manera si que me ayudaron un poco al principio, después fue cuando me dí cuenta de la complejidad del tema de la composición y vi que estas reglas aparte de no ser muy efectivas, te dejan encorsetado con respecto a la creatividad en la composición, siempre igual, el horizonte en el tercio superior o inferior, por ejemplo. Pues habrá que explorar muchas más posibilidades, claro que si, hasta donde llegue nuestra imaginación, y hasta el límite de nuestros conocimientos, por lo que cuanta más formación tengamos, más podremos potenciar la creatividad.
“Enseño a mis estudiantes a no aplicar normas o formas mecánicamente.”
Josef Albers
Por eso pienso que uno de los estereotipos sobre fotografía que me he encontrado con más frecuencia en Internet es el de las “reglas de composición”, en composición no hay reglas, si no un conjunto de conocimientos adquiridos y recopilados a lo largo de la historia. Cuantos más de estos conocimientos conozcamos y más profundicemos en ellos, más variables tendremos en nuestra mente a la hora de resolver la composición de una escena de forma estética y consiguiendo el mensaje buscado de la forma más rápida, y así conseguiremos un porcentaje más alto de fotografías que nos gusten en nuestras salidas, aunque con el tema de las prisas también quiero decir que yo pienso que la mayoría de las veces es mejor pensar un poco antes de sacar la cámara, y reflexionar sobre las formas en que podrías enfrentarte a ese sujeto, y ya una vez que hayas pensado las formas de cómo lo fotografiarías, y también las formas de cómo no lo fotografiarías, por si acaso, a lo mejor con alguna de las formas que no sueles usar se podría conseguir un punto de vista distinto, y ya elegir la forma que te parezca más apropiada para lo que buscas, o para algo nuevo que no buscas, fruto del azar, pero que al final a terminado formando parte de las variables archivadas en tu cerebro como un nuevo recurso a utilizar en alguna otra ocasión.
“El concepto de “reglas de composición” es absolutamente erróneo, debería ser impronunciable. La composición proviene de conocimientos acumulados en el devenir de la Humanidad, desde la cultura Sumeria hasta nuestros días.”José B. Ruiz
Al principio de acercarme a la fotografía y empezar a buscar información, yo estudié las llamadas “reglas de composición” por que es lo primero que me encontraba en Internet cuando buscaba información sobre fotografía, pero no terminaban de convencerme del todo, eran demasiado simples, así que seguí buscando más información, y ya leyendo algunos textos me empecé a dar cuenta de donde me estaba metiendo, entonces me dí cuenta de que para aprender sobre composición era mejor buscar en webs y libros sobre arte y pintura, que en la mayoría de publicaciones sobre fotografía, que aunque también hay bibliografía variada sobre el tema de la composición en fotografía y el análisis de la imagen, cada vez que intentaba buscar en Internet información sobre composición en fotografía me encontraba con las dichosas reglas o leyes, la regla o ley de los tercios, del horizonte, etc. por eso me dio la impresión de que era mejor buscar información en textos de arte, y más concretamente de pintura, porque la pintura es mucho más antigua que la fotografía (hay tenemos las pinturas rupestres de las cuevas de Altamira) y la pintura tiene formulaciones y formas de aprenderla mucho más complejas y trabajadas que la fotografía (que no tiene ni 200 años). También hay que tener en cuenta que la fotografía y la pintura son dos medios visuales distintos y por lo tanto hace falta un adiestramiento especial para cada uno de ellos, D. A. Dondis nos dice esto en su libro “La sintaxis de la imagen”,“El gesto, la expresión, el lenguaje escrito y la simbolización están todas al alcance del lego. Pero las artes visuales, los oficios, el diseño industrial, la fotografía, la pintura, la escultura y la arquitectura requieren practicantes con adiestramiento especial y un talento adecuado. Cada medio visual no sólo tiene unos elementos estructurales propios sino también una metodología única para la aplicación de decisiones compositivas y la utilización de técnicas en su conceptualización y formalización. La comprensión de estas fuerzas ensancha el campo de la experimentación y la interpretación tanto en lo que se refiere al autor como al espectador llevándolos a un conjunto visualmente más alfabetizado de criterios que pueden unir más estrechamente realización y significado.”
El concepto de “reglas de composición” lo encontramos por Internet muy a menudo, y llevamos ya muchos años lastrados con el, Ansel Adams tiene ya una cita al respecto, “Las llamadas reglas sobre composición son, en mi opinión, inválidas, irrelevantes e inmateriales. No existen reglas para las buenas fotografías, solo buenas y malas fotografías”, por lo que en mucha gente puede actuar como la publicidad, por efecto de saturación o reiterada exposición, por eso con estas reflexiones quiero contribuir a intentar que la gente se vaya olvidando de estas reglas y se forme de manera más profunda y que investigue nuevas posibilidades y no intente hacer buenas fotografías con cuatro conceptos que te digan en una revista u otro sitio, se aprende mucho más de composición estudiando a Leonardo Da Vinci y otros maestros de la pintura, o el número Phi y la sección áurea o la percepción visual por ejemplo, que en el mayor número de publicaciones y artículos actuales sobre composición en fotografía, que pretenden resumirte unos amplios y vastos conocimientos en cuatro reglas simplonas y encima te dicen “Todo lo que hay que saber sobre la composición en fotografía” o “Aprende composición en una semana”, y ya está, pero muy al contrario de lo que nos quieren vender en muchos sitios, aprender sobre composición requiere de muchos años de estudio y de práctica, ya que no es fácil educar nuestra mirada y nuestra sensibilidad para aprender a ver de verdad.
“Visión es el arte de ver lo que es invisible para otros”
Jonathan Swift
“Lo importante es ver aquello que resulta invisible para los demás.”
Robert Frank
“Lo que no puedes ver es infinitamente más importante que lo que puedes ver”
Duane Michals
“No estoy interesado en fotografiar nuevas cosas, estoy interesado en ver cosas nuevas”
Ernst Haas
Todo esto solo son opiniones y esta entrada solo pretende ser una crítica constructiva, ya que no quiero ofender a nadie. También hay que tener en cuenta que muchas veces estudiar el tema de la composición solo será necesario en el caso de que busques una buena estética en tus fotografías, puede ser que no la busques, como es el caso de un aficionado que no esté preocupado por la estética y no tenga pensado avanzar en el tema de la composición, simplemente por que no quiera, o de la persona que utilice las fotografías como herramienta para documentar algo y no esté preocupado por la estética en sus imágenes, sino que solo pretende documentar un viaje o algo para su trabajo, otro ejemplo sería que el motivo por el que se ha hecho la fotografía sea para la investigación, entonces puede pasar que las fotos más estéticas dificulten la tarea para la que se supone que se hacen, y que otras menos estéticas ayude a la tarea para la que se hacen, como por ejemplo poder explorar mejor lo que sea según el ángulo, la posición u otras muchas variables como las cualidades de la luz, la óptica o la técnica a emplear, que ayudaran a ver, medir, comparar, clasificar o sea lo que sea lo que se quiera hacer con el sujeto de esa fotografía para la investigación en cualquier campo de la ciencia. Esto no quiere decir que muchas fotografías que documentan algo o fotografías de ciencia no tengan una excelente composición y una buena estética y que muchas veces una buena composición no ayude a cumplir mejor una función, aunque no sea la principal por la que se ha hecho esa fotografía, ya que muchos de los casos si que lo hará, como por ejemplo la de permanecer más fácilmente y durante más tiempo en nuestra memoria, como nos dice la Gestalt en la ley de Prägnanz y Brassaï en alguna de sus citas.
“No existen reglas de composición, sino conocimientos profundos que no pueden ser resumidos para aprenderlos fácilmente, con la superficialidad y la inmediatez del mediocre momento actual.”
José B. Ruiz
Con respecto a la cita de Ansel Adams y lo de “buenas y malas fotografías” y a los conceptos “bueno” y “malo” en fotografía, y en el arte en general, también hay que ser cauteloso, yo más bien utilizaría expresiones como “para mi tiene una composición más o menos acertada”, o “en mi opinión transmite más o menos”, o “para mi impacta más o menos”, “en mi opinión utiliza la técnica y las posibilidades mejor o peor”, o “a mi me gusta personalmente más o menos”, etc. Aunque algunas veces pienses “es una broza de fotografía”, o “esa fotografía no vale para nada” o “esa fotografía no me dice nada” a lo mejor a su autor o a otras personas si les gusta, tu solo puedes dar tu opinión, diciéndole lo que no te gusta, porqué y como mucho como lo resolverías tu, pero sin intentar imponérselo, sino solo a modo de ejemplo, para intentar que su autor se fije en algunos detalles, que a lo mejor tú mismo antes tampoco percibías y que pueden ser importantes para variar el resultado considerablemente para mejor, en tu opinión claro, y que una vez que se haya formado más y aprenda a ver las cosas con más matices de los que las veía antes, entonces que elija él el camino que va a seguir, pero como comenta Fernando Puche, en una de sus metáforas, no con estas palabras exactamente pero si con esta idea, y es que necesitamos de un suelo firme en el que vallamos de la mano de alguien antes de echar a volar solos, con paracaídas claro, sino queremos pegarnos una buena galleta.
“El enemigo de la fotografía es lo convencional, las reglas fijas sobre el como. Su salvación vendrá de la experimentación”
Ernst Haas
También hay que tener en cuenta que matices o fórmulas que algunos fotógrafos pueden considerar “malos”, pueden ser un recurso muy empleado por otros, obteniendo buenos resultados. Por lo que muchas veces observaremos subjetividad y discrepancia en algunos aspectos cuando valoramos el como, tanto técnica como compositivamente, también a la hora de elegir lo que consideramos una “buena fotografía” o a la hora de poner unas fotografías en un orden de preferencia, por ejemplo. Aunque yo creo que esto se debe en parte a la escasa cultural visual que tiene la sociedad de nuestros días, aunque seamos bombardeados cada día con muchísimas imágenes, también creo que si los que observan la fotografía están formados y tienen cierta cultura visual, coincidirán bastante en sus opiniones, pero todo esto puede ser un tema bastante polémico y puede haber muchas discrepancias a la hora de marcar un límite de hasta donde llega la subjetividad y hasta donde algunos factores son subjetivos cuando valoramos una fotografía, su mensaje, o también cuando analizamos el efecto que pueda crear en el espectador.
Para terminar voy a poner un extracto del texto “La percepción visual” donde Juan cordero Ruiz critica los esquemas estereotipados en el arte, y por lo tanto las “reglas de composición”:
“Hagamos un inciso para caer en la cuenta sobre el daño que producen al arte estas ideas de esquemas estereotipados y encasillamiento de los amplios matices diferenciales de las obras de arte. Si mirásemos con ese criterio dos cuadros, uno de Velázquez y otro de cualquier contemporáneo suyo mediocre, las diferencias no serían de bulto, y por ello inapreciables: iguales argumentos, composición, colorido, personajes... Las diferencias habría que buscarlas en los pequeños matices que siempre escapan a las clasificaciones globales. Podemos decir que la obra vulgar no se diferencia en sus planteamientos de la obra maestra, que estos planteamientos y el aspecto general pueden ser comunes, su diferencia se encuentra en pequeños y sutiles detalles que sólo se perciben por una sensibilidad bien educada. Una cultura de clasificaciones maniqueas etiquetadas en "bueno" y "malo", que borra los matices y medias tintas, prejuzgando obras y personas por el casillero que les correspondió, incapacita para la actividad artística.”
Juan Cordero Ruiz
Estaría bien que todo aquel que le preocupe este tema, colaborara poniendo su opinión escribiendo un comentario, contribuyendo así a crear un debate en el que podamos ver distintos puntos de vista y distintas opiniones sobre las “reglas de composición” y todos los temas tratados en esta entrada, gracias.
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